“Isekai” La fórmula Disney del anime actual

La famosa fórmula Disney

En más de una ocasión las redes sociales o incluso nuestros amigos nos han comentado de la famosa fórmula Disney. Cuando nos mencionan esto, uno siempre se imagina una serie de pasos pre establecidos, que fusionados con el marketing tienen el objetivo de aumentar las ventas de aquellas tan famosas películas infantiles y las recientes películas de superhéroes.

Lamentablemente lo antes mencionado perjudica el buen criterio para llegar a una historia de calidad, además ligado con la visión particular de los directores de cine y televisión, puede resultar un éxito o la condena de una franquicia. De esta manera suelen ser predecibles para un público no tan joven que termina liquidando el interés de explorar una trama diferente, pero ¡vamos!, es Disney, le ha funcionado por mucho tiempo ¿cierto?, en este caso la respuesta tomará un poco más de tiempo para mostrarse.

La industria del Isekai

Aunque sea una industria diferente, con un contexto e historias diferentes, el anime en su constante crecimiento ininterrumpido, poco a poco está decayendo, debido a la repetición sistemática de una cierta fórmula aplicada a ciertas demografías y géneros. Esto se ha podido ver en el Shonen desde hace mucho tiempo, pero más notoriamente en el Isekai. 

¡No pueden negar que has visto por lo mínimo un Isekai! Quizás hasta no lo sepas, pero en los 90tas existieron animes como Digimon o incluso Inuyasha, que forman parte de este género, estos ejemplos tan diferentes entre ellos son solo un inicio a la variedad de historias que exploran el vivir e interactuar en un mundo diferente al nuestro.

Algunos Isakais muy populares nacidos de novelas ligeras como RE:zero, Mushoku Tensei, Overlord, entre muchos otros, han explorado esta idea de manera muy cruda, madura y hasta sórdida, cargadas de una trama que supera un poco lo simple de la esencia de todo Isekai, lo cual ha llevado a la creación de muchos animes con la intención de replicar un éxito similar a las obras antes mencionadas, de este modo nacieron obras que quizás, con temática parecida, intentan ser un calco completo de otras previamente expuestas en el mercado.

¿Qué significa esto? Simplemente que una historia previamente bien recibida por el público pasa a convertirse en una fórmula, capaz de replicarse en diferentes tonos y demográficas, tomando la misma estructura argumental básica una y otra y otra vez. A veces no se tiene la intención de verlos como algo repetitivo, aunque en algunas ocasiones si, en este contexto no han faltado las temporadas de animes actuales con dos o tres Isekai como mínimo.

La esencia misma del Isekai

Así pues, poco a poco las historias comienzan a perder originalidad en su ejecución volviéndose menos interesantes y otras más del montón. Puede ser que estos métodos poco creativos terminen  zombificando un poco a los consumidores habituales de anime, quienes en busca de ver algo poco convencional y novedoso, lamentablemente terminan en aniquilar poco a poco el interés que existe en este tipo de género.

A pesar de lo anterior planteado, siempre hay sorpresas gratas en la industria, mostrando cosas sumamente creativas y a su vez también algunas carentes de sentido.

Algunos animes son muy coherentes en su historia, mostrando héroes con poderes mágicos en mundos de fantasía, otros incluso parodiando así mismo, quitando todo rastro de epicidad en la misma, pero en este mismo caso se pueden ver historias que abusan mucho de un recurso muy sonado llamado “El pez fuera del agua”.

Aquí se exploran situaciones que solo en un mundo de fantasía se podrían explorar; abogados u oficinistas japoneses en reinos mágicos, relatos subidos de tono como hombres solteros visitando burdeles de seres míticos como elfas o centauros, temas sórdidos como el exterminio, acoso y destrucción de una etnia completa solo por fines políticos. Estas situaciones o acontecimientos sólo podrían ejemplificarse de esa manera, en un mundo mágico e imaginario para no golpear la sensibilidad de la sociedad actual. 

Pero ¡es cierto! Disney nunca tocaría temas tan duros que puedan golpear las bases de lo políticamente correcto por dar un mensaje, es por esto y otros motivos que no se puede encasillar al concepto o la esencia del Isekai como una fórmula, aunque a veces esta pueda verse y hasta comportarse como una.

Aunque viéndolo de este modo uno puede creer que la creatividad de este tipo de historias se ha vuelto vacía. Pero la misma no ha dejado de crecer, sino todo lo contrario se mantiene en total crecimiento. También el género ha sido tomado de la mano por diversos mangakas y creativos de renombre que dan impulso y hasta un aire de esperanza a este desgastado concepto.

Es que… ¿Cómo no hacerlo? Todos tenemos un deseo natural de querer vivir en un mundo diferente al nuestro, donde nuestros deseos más íntimos se pueden cumplir. Es inherente al ser humano desear querer vivir en la realidad palpable, lo que nuestra mente imagina, por eso el atractivo hacia el Isekai es algo que no está destinado a disminuir con el tiempo, ya que todos queremos nuestro propio mundo, donde podamos jugar, pelear, reír, disfrutar y emocionarnos sin límites, así que no se extrañen si algún día, lo que pudieron imaginarse alguna vez en un momento de escape, termine siendo material de una historia Isekai.

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